domingo, 5 de octubre de 2014

Adelgazantes y salud del corazón


Estar en el peso ideal es lo que los médicos recomendamos y todos los sujetos desean para un mayor bienestar personal y una eficaz protección de la salud, pero…no todo vale.

Sibutramina, el principio activo de Reductil, un medicamento de laboratorios Abbott con propiedades adelgazantes que fue introducido hace algunos años en el armamentarium farmacológico contra la obesidad, ha sido retirado por consejo de la Agencia Española del Medicamento en base a las complicaciones cardiovasculares derivadas de su consumo.

En efecto; el estudio Scout  llevado a cabo a lo largo de 6 años en más de 10.000 pacientes con sobrepeso u obesidad franca ha demostrado que la incidencia de infarto de miocardio, ictus y muerte cardiovascular ha sido un 16% más elevada cuando sus resultados se han comparado con los del grupo placebo. Además, la reducción de peso en el grupo de pacientes tratados activamente fue muy poco relevante.

No es el primer caso.  Hace algo más de un año, Rimonabant (Acomplia) un fármaco introducido para el tratamiento de la obesidad y el tabaquismo, hubo de ser retirado precipitadamente de las farmacias por sus efectos colaterales indeseables entre los que cabría destacar una marcada tendencia al suicido así como algunos casos de suicidio consumado.

Otro adelgazante comercializado con el nombre de Depuralina, un compuesto hecho a base de semillas, frutas y plantas fue retirado en abril de 2008 por predisponer al desarrollo de reacciones anafilácticas graves y marcada toxicidad hepática. Este presunto fármaco, expendido sin receta y ampliamente publicitado, sufrió el mismo proceso que otro llamado Somatoline Cosmetic que prometía reducir la celulitis hasta en un 33% y que resultó ser un fiasco total. Ambos hubieron de ser precipitadamente retirados de la venta por orden gubernamental.


Hay que ser precavido y estar muy bien informado de lo que se toma, pues si como ha quedado demostrado, fármacos que han sido experimentados ampliamente siguiendo protocolos de investigación médica muy estrictos han de ser retirados por efectos colaterales severos, incluso mortales, otros, cuya eficacia se basa en promociones publicitarias engañosas pueden o no tener ningún efecto farmacológico o en el peor de los casos provocar trastornos graves de salud.

No hay comentarios:

Publicar un comentario