Un estudio observacional llevado a
cabo en la London School of Medicine por el Dr. Vikas Kapil y colaboradores ha
encontrado reducciones significativas en la presión arterial máxima y mínima de
pacientes hipertensos que consumían diariamente un cuarto de litro de zumo de
remolacha durante 4 semanas. Se especula que esa cantidad de jugo de remolacha, que contiene algo más de 6 milimoles de nitratos, sería el agente directamente
responsable del efecto antihipertensivo.
La reducción tensional se observó
tanto si las medidas de presión arterial eran hechas en el consultorio, el hospital, en
el domicilio o en registro ambulatorio continuo.
Los autores del
estudio pudieron comprobar, además, el beneficio que el zumo de remolacha ejerce sobre
la pared de las arterias disminuyendo su rigidez y activando positivamente la
función del endotelio, efectos que no pudieron observarse en el grupo placebo.
En palabras del Dr. Kapil “Éste es el
primer estudio que demuestra que una dieta rica en nitratos reduce
significativamente la presión arterial en pacientes hipertensos de ambos
sexos.”
El ensayo clínico enroló 64 pacientes de ambos sexos con tensión arterial elevada comparados a un grupo control equiparable en
características demográficas y clínicas y que tan sólo recibieron placebo. Los
resultados acaban de ser publicados en noviembre de 2014 en la prestigiosa
revista médica Hypertension.
Como explican los autores, una dieta
rica en nitratos inorgánicos elevan las concentraciones sanguíneas y tisulares
de estos compuestos cuyos efectos sobre la presión arterial y la función arterial
son beneficiosamente demostrables.
Por otro lado, es un hecho conocido que los nitratos son potentes vasodilatadores, un efecto
con reconocidas propiedades sobre la dinámica arterial y muy particularmente
sobre el árbol arterial coronario, lo que podría hacer pensar que el jugo de remolacha podría ser, también, un eficaz aliado contra determinadas enfermedades cardíacas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario